Construida en 1973, esta casa guarda la esencia de aquellas viviendas mediterraneas con alma, donde cada rincon respira luz, naturaleza y mar. Situada en la exclusiva urbanizacion privada de Cala Nova, con vigilancia 24h, es de esas propiedades unicas que ya casi no se encuentran. Desde que cruzas la puerta, el sonido del mar y la brisa mediterranea acompanan el recorrido. El salon principal, con su chimenea de piedra y grandes ventanales, regala unas vistas abiertas al azul intenso de la cala Xelin. La cocina, sencilla y funcional, ha sido testigo de sobremesas eternas en familia y amigos, igual que su comedor, donde la luz de la tarde entra a raudales. La vivienda se distribuye en tres plantas. En la planta principal, cinco habitaciones dobles con armarios empotrados invitan a largas estancias junto al mar, acompanadas de dos banos completos, uno de ellos en suite. En la planta superior, un estudio con bano propio abre paso a una terraza magica, desde la que contemplar el mar se convierte en un ritual diario. Y en la planta inferior, el garaje, con espacio para un coche y la posibilidad de transformarse en un estudio independiente. El exterior, con sus 545 m2 de parcela, conserva ese aire mediterraneo tan autentico: terraza con visitas al mar y la montana, una ducha al aire libre, un cuarto de lavadora, la zona de tendedero y, sobre todo, unas vistas que enamoran desde cualquier punto. La urbanizacion, ademas, ofrece piscina comunitaria, pista de tenis, padel y fronton, siempre bajo la tranquilidad de contar con seguridad privada las 24 horas. Esta casa no es solo una vivienda, es un lugar con alma. Una construccion solida de los anos 70 que mantiene el encanto intacto y espera a quien sepa valorar su magia. Porque aqui, en este rincon de L’Ametlla de Mar, el tiempo parece detenerse frente al mar. IW